"Su ignorancia y su aversión a esa cosa nueva cuya llegada era inminente eran atroces; pero decía que en ese instante nada era más penoso que la idea pertinaz: «¿Y si no mueriese? ¿Y si volviese a la vida? ¡Qué eternidad! ¡Y todo eso sería mío! Entonces haría de cada minuto un siglo eterno, no perdería nada, llevaría la cuenta exacta de cada minuto y no malgastaría uno solo!»"
(Dostoyevski)
(Foto por David Rodríguez - 2015 / https://www.behance.net/drodgo)
Soy…
Soy
la consecuencia
no
deseada de los sentimientos.
Soy
el honor y la decencia
olvidados
en remordimientos.
Soy
el vencido en enfrentamientos
y victorioso
en potencia.
Pecado
sin penitencia
y sombra
del sufrimiento.
Soy…
Soy
humano,
“demasiado
humano”.
Soy
quien decepciona,
cuando
tiende la mano.
Soy
quien se apasiona
con
ego de tirano
y corazón
de buen samaritano.
Soy
aquel que no se abandona,
uno
de tantos…
días
de antaño.
Soy…
Soy
el monitor
de
ritmo cardiaco,
estoico
dionisiaco,
discípulo
sin tutor,
ángel
demoniaco,
sensualidad
con pudor…
Acetaminofén
y tabaco
que
no quitan el asco
ni
el ardor,
ni
el fiasco
de
su compasión:
la
misericordia sádica del Creador.
Soy…
Nostálgica
elegía
del
ruiseñor
enjaulado,
cada
uno de los días
del
presidario
por
estafa estafado,
inocente
encarcelado,
cómplice
de sus victimarios,
víctima
del diario.
Soy
la fantasía
realista
del fastidiado.
Soy
el fedatario
de
la apostasía,
la
luz frente al armario.
Soy…
Quien
al decir se desdice,
pesimista
que repite,
desahuciado
que insiste,
profeta
perjuro que predice:
¡Lo
mejor está por venir!
Por: EBL (2015)
No hay comentarios:
Publicar un comentario